El centro parroquial supo ser por años una de las instituciones más emblemáticas de Famaillá y en la actualidad retomó su actividad con más bríos que nunca.
El centro parroquial se abrió en junio del año pasado después de varias reuniones con el padre párroco Jorge Acosta, quien se encontraba por entonces a cargo de la parroquia y la congregación famaillense.
“Llegamos al mes de enero y decidimos cerrar por unos días, debido al intenso calor por la altas temperaturas propias del verano tucumano. Cuando quisimos volver en febrero, tuvimos que esperar hasta que asumiera el nuevo párroco que fue en el mes de marzo cuando se hizo cargo de la congregación el padre Rafael Navarro” exclamó Victor Castaño Presidente de la Comisión que maneja el centro.
El centro, está funcionando con el respaldo legal correspondiente y también con autorización del arzobispado por lo que se encuentra al día en términos jurídicos “Me citaron del arzobispado a una escribanía de San Miguel y allí firme un contrato por 3 años con algunas cláusulas y condiciones a las que debemos respetar.Así ingresamos en marzo con todas las categorías de mosquitos, premini y mini básquet” expresó Castaño
La institución se dedica, entre otras labores, a entrenar a las distintas categorías de mini Básquet, aunque el año pasado también entrenó a las categorías mayores “este año no se pudo participar en básquet de mayores por razones económicas y laborales a pesar de que el año pasado llegamos a semifinales de la Liga del Sur. Decidimos recibir y trabajar con chicos desde los 6 años en adelante, estamos convencidos que recibiendo de esa edad pueden ser menores formados” comentó el presidente.
El centro trabaja por medio de una comisión de padres integrada por Florencia Ávila (Presidente) Sebastián Failla (vicepresidente) Karina Nieva (secretaria) Celina Alonzo (Tesorera) y Valeria Cisnero (protesorera)
que tienen como función acompañar a la Dirección y colaborar comunitariamente para conseguir los elementos que los niños necesitan para entrenar. A través de beneficios se obtienen los fondos para los aros, pelota, indumentaria y demás elementos necesarios.
Sobre los expectativas, la comisión reconoce que se trata de una labor hormiga, realizada de cara al futuro “de este trabajo se verán los frutos en un par de años y estoy seguro que nuestro querido Famaillá volverá a ser una de las mejores plazas de básquet del sur de la provincia como era en otros tiempos” dijo entusiasmado Castaño.
Por ultimo cerró con un reconocimiento “Quiero agradecer a todos los padres por estar siempre dispuestos, a los profesores a los que hoy están acompañando como el profe Horacio García, Eduardo “Negro” Isa, Sergio Pani, Jorge “Bubu” Matías, Sebastián Failla, Alberto “Lerdo” Isa y al Padre Rafael por apoyarnos en todo”.
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