Foto: El Tucumano
Una vez sofocadas las llamas y rescatada la mercadería que no fue afectada, los trabajadores recordaron que hace exactamente un año atrás ocurrió lo mismo en otro lugar del predio. “Todo esto está armado”, acusaron.
Este miércoles, cerca de las 6:30 de la mañana, ocho puestos de la exTerminal de Ómnibus de San Miguel de Tucumán fueron consumidos por un incendio, que fue controlado cerca de una hora después.
“A las 6:20 estaba pasando por acá porque tengo un puesto más adelante. Llegando se sintió una explosión en el primer puesto. Entonces las llamas fueron hacia arriba y se empezaron a prender puesto por puesto”, contó uno de los hombres que trabaja en el predio. Luego uno de ellos se animó a señalar a la Municipalidad de San Miguel de Tucumán. “Esto es política. No sabemos si Germán fue uno de los que mandó a hacer esto. Acá hay mano negra. Siempre nos quiere sacar, nos tiene amenazados que nos va a sacar de acá y de allá y acá están las consecuencias”, acusó.
Luego, los trabajadores hicieron foco en el accionar de la Policía de Tucumán y los Bomberos, que según dijeron, tardaron 35 minutos en llegar. “Cuando empezó el incendio estaban los chicos que cuidan acá y quisieron apagar el fuego, pero la Policía no los ha dejado. Si los dejaban entrar iban a poder apagar algo y esto no pasaba”, afirmó una mujer.
“Treinta y cinco minutos hasta que llegaron los Bomberos. Bajaron cuatro. Tenían un hacha y no podían abrir un chapón. Cuando conectaron la manguera, en el primer puesto se les acabó el agua y de ahí se empezó a incendiar todo”, detalló otro de los puesteros. “Todo esto está armado. Es así”, cerró.
“La verdad no sabemos bien lo que pasó, pero nos caben dudas de que hoy se cumple un año y 19 días desde que se incendió aquel 6 de enero del año pasado, en la zona sur de la exTerminal”, dijo Luis Fernando Ocampo, Secretario General de APER, Ambulantes por la Economía Regional.
“No tuvimos ninguna solución concreta. Siempre pedimos Salud, Seguridad. Queremos hacer una mesa panel para que participen las patas que tienen que participar: Provincia, municipio y los entes reguladores y que incluyan al sindicato de los vendedores ambulantes. En un año, no tuvimos ninguna solución, regularización, ni un llamado”.
Ante las versiones de cierre surgidas tras el incendio del año pasado, Ocampo contó que “en aquellos momentos vino un perito municipal y quería cerrarla”. “Nosotros trajimos un perito de la DAU, uno privado y nos hicimos asesorar bien y no había ningún peligro de derrumbe”. “Estamos a un año y no pasó nada. No tenemos respuesta del Municipio para la orden para modificar lo siniestrado en aquel momento”, añadió. “Son 8 puestos siniestrados, donde son más de 32 familias afectadas. Estamos viendo de hacer gestiones para colaborar con los compañeros para que puedan seguir llevando el pan a la mesa”, finalizó.
Fuente: El Tucumano
